martes, 11 de noviembre de 2008

ANDALUCIA, TIERRA DE CONQUISTA PARA CASTILLA

A título de recapitulación, y dado el actual estado de la investigación histórica sobre esta problemática, podríamos concluir:
1. Que Andalucía occidental fue, para Castilla, el primer territorio clonial conseguido en fase de madurez expansiva. La ocupación de tales tierras, su distribución, etc; responde a tal concepción. El predominio de una nobleza activa y de unas órdenes militares se justificaban por el carácter fronterizo del territorio conquistado.
2.Las órdenes se terminan por alargar siendo la raya de Portugal; al sur de la provincia de Huelva se asienta, en Niebla, uno de los focos más importantes de la nobleza conquistadora de Andalucía. El otro foco de dicha nobleza se sitúa en la otra frontera, en la del reino de Granada.
3.La nobleza conquistadora, por el papel activo que representa, se vincula a las más importantes villas de la región: Niebla, Marchena, Osuna, Estepa, Morón, Montilla, Lucena, etc.
4.En una primera etapa de expansión señorial, los señorios asentados en los extremos -Niebla y Sierra Sur- presionan y terminan por ocupar lo que actualmente corresponde a la prvincia de Cádiz: Niebla se extiende hasta Medina Sidonia; aparece la casa de Arcos y la familia de los Rivera y Ponce de León penetran también de manera profunda.
5.A mediados del XV, dos procesos son coincidentes: uno, la formación de mayorazgos por caballeros y nobleza secundaria ligada a Sevilla capital y a actividades mercantiles; en ese período la nobleza conquistadora se asienta en la zona de la campiña sevillana.
6.Por compra pueden adquirirse jurisdicciones y territorios: la zona de la vega del Guadalquivir y la del Algarafe conocen una implantación señorial sobre los lugares y villas de las órdenes. Será ésta la “segunda nobleza” que, por la práctica de vinculaciones y mayorazgos, llegará a ser también significativa desde el punto de vista de posesión de tierras.
7.Proceso de concentración de señorios y títulos a lo largo de los siglos XVI-XVII, con su jurisdicciones en tierras, tanto en los de la “nobleza de conquista” como en la “segunda nobleza”: función de los Alcalá-Ribera-Medinaceli, de la Casa de Osuna y la Casa de Arcos,preeminencia de los Medinasidonia, etc. Con ello se originan unos auténticos “estados” señoriales, de tipo regional, que en el siglo XVIII conquistasrán verdaderos estados dentro de la monarquía española.
8.El proceso de implantación señorial fue tardío y progresivo, de aquí la vigencia que tenía cuando a fines del XVIII se plantea el problema de la supresión de la feudalidad y de los regímenes señoriales.

BERNAL, A.M. La lucha por la tierra en la crisis del Antiguo Régimen. Madrid, Taurus, 1979. Págs. 55 y 56.

[Francisco Jesús Ordóñez Jiménez y Álvaro Jiménez Molina]